El
cobro en otra forma
- ¿No
habrá otra forma de que cobres la consulta?
Me soltó de golpe y porrazo, haciendo énfasis en el
“otra forma”, aquella paciente ya conocida en el consultorio de varios
años, los suficientes como para tenerle consideraciones especiales… le había pedido a
su hijo adolescente que se saliera del consultorio y se cambio a la silla mas
próxima.
Era una de esas pacientes que aunque ya madura, cuidaba de verse
atractiva y conservaba cierta coquetería “inocente”...
Durante la consulta, no paro de
acomodar, distraída, la entallada blusa, jalando de las solapas el
cuello, pronunciando más sus notorias curvas…
- Ejem… -
atendí a contestar de inmediato, puse mi cara de extrañeza y le pregunte
- ¿Cómo dice?
- Hay doc! – e
hiso un histriónico movimiento inclinándose hacia el escritorio mostrando mas
de lo que debía a travez del prolongado escote
- Por favor no me rechaces lo que te voy a proponer, para mi también es difícil - me contesto... te aseguro solo esta vez, no te voy a causar problemas... no te lo vuelvo a pedir... ademas... hiso una pausa, de esas que sientes que escurre la gota de sudor por la frente y me prepare para lo peor
- Vengo
preparada…
Sentí que la cara se me ponía pletórica mientras la
mujer ponía su "inocente" cara de apenada y metía las manos a su bolso - tenemos
años de conocernos y me da un poco de penita proponértelo… pero estoy muy
necesitada y mi a ex no lo he visto en dos meses… y yo tengo que cubrir
mis necesidades...
Confesare que en ese momento ya pasaban por mi
mente un sinfín de situaciones, propias de la imaginación del sexo masculino...
Abrupamente saco del bolso, un fajo de pequeños papelitos de 12 x 8 cm
- ¿te
puedo pagar con bonos de despensa o vales de gasolina? ...o de plano ¿me esperas
para la quincena?
A veces uno oye lo que quiere oír y la
imaginación hace lo demás…
Esa semana mi carro no paso hambres…